¿Vuelve el mailing tradicional, el de sobre y sello?

mailing tradicional en correos

¿Vuelve el mailing tradicional, el correo postal de sobre y sello?

Cuando por la mañana abrimos la bandeja de correos entrantes nos encontramos con unos cuantos correos en la bandeja, o unos muchos.

Las newsletters de las páginas que nos interesan y los mails que no sabemos de donde han salido y, algunas veces ni sabemos si los hemos autorizado, nos “animan” la bandeja de entrada.

Y como todas las empresas vivimos de nuestras ventas, el email marketing se ha convertido en una herramienta comercial muy eficiente o eficaz, según lo hagamos.

Nosotros hacemos mailings (email marketing) casi todas las semanas, intentando segmentar muy bien las bases de datos (el CRM, Customer Relationship Management, gestión de las relaciones con los clientes) y cuidando la frecuencia a los diferentes destinatarios.

La verdad es que tenemos muy pocas bajas y bloqueos.

El in-house email marketing es económico y te permite controlar los envíos en tiempo real, según lo preparas vas “liberando” algunos destinatarios del envío.

Pero todos los años hacemos, por lo menos, un mailing postal, de esos de pegar el sello en la carta o de contratar a una empresa que te lo haga.

Ya que diferenciarte en la bandeja de entrada es complicado, cada vez recibimos menos cartas (ya ni las del banco) por lo que recibir una carta de 28 gramos en un sobre, con papel Conqueror o Parchemin, se puede convertir en un evento especial.

Y si consigues un sello especial (cada vez mas difícil) de esos de pegar con saliva o con agua, la experiencia puede ser más interesante y hasta emocionante.

El que hemos hecho esta semana ha sido a unos cientos de hoteles, seleccionados uno a uno, y corregidos los nombres y direcciones uno a uno.

El motivo del envío era especial también: en marzo hemos organizado un curso de Revenue Management Avanzado en Bilbao con profesores de mucho prestigio.

Veamos algunas diferencias entre el email marketing y el marketing postal.

PRECIO:

El inhouse email tiene un coste de horas-hombre (pocas) pero prácticamente poco mas. Nosotros utilizamos Zoho que por 20 dólares fijos al mes te permite enviar más de 15.000 mails al mes. A 0,13 céntimos la dirección, aunque te incluye el CRM de tus contactos, ilimitado. El mailchimp de pago sale a unos 5 céntimos el mail enviado. La versión gratuita permite 2.000 registros y hasta 12.000 envíos/mes.

El franqueo de correos acaba de subir. En publicorreo (mínimo 500 envíos) las direcciones a ciudades importantes está cerca de los 20 centimos, a localidades menores se acerca a los 30 céntimos. Folleto, carta, sobre, ensobrado, manipulación de archivos, etiquetas, … supone que lleguemos a cifras entre 60 céntimos y un euro.

TIEMPO:

Email es inmediata la entrega y el destinatario la abre, o no, cuando lo considere oportuno o cuando pueda.

El correo postal uno o dos días en localidades próximas. Para Canarias cerca de una semana.

RECHAZADOS:

Los conocidos “bounced” de mailchimp y otros se detectan rápidamente y recibes informes casi de inmediato. El correo postal recibes de vuelta las cartas que no se pudieron entregar a las dos semanas.

APERTURAS:

En email tienes acceso a los datos de aperturas permanentemente aunque una vez pasadas las primeras 24 horas se abren pocos. Tienes esa info si utilizas mailchimp o similar. Si haces envíos masivos hay plataformas que no te dan esa info.

Con el correo postal nunca sabrás cuantos han abierto la carta. Un envío cuidado puede y debe despertar interés, en las dos opciones.

CLICS:

Clics en enlaces es un dato en email marketing. En el mailing postal de toda la vida no hay enlaces, pero si hay llamadas a la acción cómo llama a este número o envía este cupón de franqueo gratuito.

CONVERSIONES:

Esto ya es más complicado, especialmente en el caso del mailing tradicional.

Nuestro email iba con la firma escrita con un BIC azul, y el nombre de pila del destinatario escrito a mano.

Por desgracia no pudimos encontrar, ni siquiera en correos, sellos de pegar con agua o saliva. La próxima vez buscaremos con mas antelación.

Porque el mailing mejor elaborado de nuestra vida siempre ha sido el de las invitaciones de tu boda: una selección cuidadosa de los invitados, una revisión a fondo de las direcciones, un soporte de papel y sobre especialmente elegidos, algún detalle escrito a mano y seguimiento de la recepción y confirmación de asistencia. Con este estilo vintage de mailings tradicionales puedes hacer sentir a tu cliente o potencial como un invitado.

Si eres hotelero, a lo mejor lo recibes cuando estés leyendo esta entrada de Linkedin, aunque poc@s han sido l@s afortunad@s.

¿Eres de mailing tradicional o de email marketing?

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