El Revenue Management en Santiago es, como en todas partes, una labor delicada y trabajosa.
Mucha demanda, estacional también, pero mucha oferta y apertura continua de alojamientos. Lo que hace que los precios sean muy, a veces demasiado, competitivos.
Ayer compartimos el curso en el Gran Hotel Los Abetos (Sercotel) a los asistentes de varios hoteles de A Coruña, Ourense y el mismo Santiago.
Aunque nos lo han explicado ya alguna vez en los últimos años, a los no especialistas en el Apóstol Santiago, nos queda en la cabeza que el Año Santo es como las olimpiadas o los mundiales de fútbol: se produce cada cuatro años.
La realidad es que el año Santo es cuando el 25 de julio, día de Santiago, toca domingo aunque a muchos profesionales les gustaría que fuera como las olimpiadas. El actual período sin año Santo es de 11 años, se hace un poco largo.
El Revenue Management en Vigo, Madrid o len as Maldivas es una forma de gestión que se basa en los datos, en la información (conocimiento del cliente, comportamiento del mismo, conocimiento de la competencia, de tu hotel, de los eventos del destino y de las festividades de origen … entre otras cosas), en el prueba y error, en la experiencia y le dejaremos un porcentaje a la intuición, intentando que esta tenga un peso pequeño.
También nos dio tiempo a visitar la Catedral de Santiago, y de disfrutar de algún Albariño y alguna cerveza rubia gallega, tanto en el casco antiguo como en la parte mas moderna de la ciudad.
Hoy seguimos con el curso de Aumentar la Venta Directa, la gran preocupación de los hoteles en el sXXI: aumentar la ocupación y los ingresos, reduciendo las comisiones.
Y dentro del contenido del curso publicamos esta entrada de blog en tiempo real.
Además de asistentes del Gran Hotel Los Abetos asisten varias personas de los equipos de dirección y recepción del Hostal Residencia Fornos, el Hotel Bonaval y del Hotel San Bieito, de Santiago, del Hotel Avenida y el Hotel Plaza de A Coruña, y del Hotel Miño de Ourense.
Esta tarde seguiremos con el curso de Redes Sociales para hoteles, mientras a unos cientos de metros siguen pasando los peregrinos solitarios o en grupos de dos o tres. Animo que quedan sólo 3 ó 4 kilómetros, ya no es nada.
Revenue Management en Santiago de Compostela
